El marketing de contenidos es una estrategia de artículos, pódcast y vídeos que ofrecen contenido informacional y/o transaccional con el objetivo de atraer más usuarios a una página web o a un perfil de redes sociales, fidelizar los que ya tienes y aumentar las ventas y los clientes.
Las empresas son conscientes de lo importante que es estar presentes en internet. Sin embargo, después de invertir tiempo y dinero en montar una web, no reciben las visitas deseadas, ni les reporta los beneficios que esperaban. Esto es algo, que en muchas ocasiones, se puede resolver con un buen marketing de contenidos.
Julio montó una casa rural en un pueblo de Badajoz. Encargó el diseño de una bonita página web. Esperaba que a través de ella le llegaran las reservas suficientes para hacer rentable su negocio. A la página web entraban los amigos, la familia y las otras casas rurales de la provincia para ver qué es lo que había colgado en la página. La web no estaba dando los resultados esperados. Se puso en contacto con Digital Growth, una agencia de marketing digital de la provincia y decidieron agregar un blog a la web. En el blog colgaron artículos que resultaban interesantes para aquellas personas que se estaban planteando hacer una escapada a una casa rural. O que deseaban pasar unas vacaciones tranquilas lejos del bullicio de la playa.
Poco a poco empezaron a llegar reservas a través de internet. La gente que entraba en el blog para leer un artículo, descubrían que Julio alquilaba una coqueta casa en el campo pacense. Algunos de ellos se pusieron en contacto con Julio para interesarse sobre las condiciones y otros reservaron su estancia en ese puente que estaba tan próximo.
Desde luego, el marketing de contenidos es efectivo. Estas son algunas cuestiones que debes tener en cuenta si te estás planteando recurrir a él:
Los contenidos se deben planificar.
Algunos que abrimos un blog personal hace unos años, lo hicimos con la intención de compartir con los demás aquellas cosas que nos interesaban. Para expresar nuestro punto de vista y transmitir una información que nos parecía importante. Hacíamos un blog sobre algún tema que nos gustaba: películas, libros, música, videojuegos. O recurríamos a crear un blog misceláneo, un cajón de sastre donde cabía todo. Más allá de ser un bonito hobby, no tenía ninguna repercusión.
Publicaba lo que se me venía a la cabeza. Este es un error que comete mucha gente que abre un blog. Incluso blogs profesionales. Esto es un error. Cuando creas un blog debes plantearte para qué lo haces. ¿Cuál es el objetivo?, ¿lo haces para que te compren tus productos o servicios?, ¿lo haces para que tu marca sea conocida?, ¿para convertirte en un referente en tu sector?
Después debes plantearte quién va a leer tus artículos. ¿Cómo es ese lector potencial?, ¿qué temas le interesa?, ¿qué información busca cuando se mete en Google? Esto ordena el contenido que vas a publicar. Sí, manda él y no tus caprichos. Porque va a ser él el que te va a encontrar y el que va a decidir si lee lo que publicas o no.
Esto requiere un trabajo de investigación previo y un seguimiento. Porque a lo mejor, tu artículo más leído o aquel que más visitas recibe desde Google es aquel al que menos importancia le dabas. Los usuarios te encuentran por ese contenido. Es interesante persistir en él.
En mi opinión, los blogs tienen dos efectos importantes: Te ayudan a posicionar en los buscadores y ganas en autoridad.
Cuando hablo de buscadores me refiero tanto a Google como a YouTube o a la plataforma en la que estás colgando contenido. Está comprobado que las páginas web que tienen un blog bien trabajado reciben más visitas que aquellas que no lo tienen. En primer lugar, porque los buscadores descifran el tema de una página web, por lo que se publica en ella. Los algoritmos de los buscadores funcionan a través de palabras. Cuantos más artículos relacionados con una temática tengas, más fácil es que el buscador recomiende tu página en los primeros puestos. Aquí entran otros aspectos como el S.E.O., pero no nos vamos a desviar por ahí.
En segundo lugar, la autoridad es el nivel de referencia que tienes respecto a una temática. Si publicas artículos interesantes sobre un tema y das respuesta a las dudas y preguntas que se formulan los usuarios, más sencillo será que te tomen en cuenta a la hora de comprar. Algunos de tus lectores se aficionarán a tu contenido y te convertirás en un experto en la materia para ellos. Hoy en día, la gente se informa por internet antes de adquirir un producto o servicio.
Coustomer Journey.
Este es un vocablo inglés que se refiere al viaje del comprador. La recopilación de información que va realizando un usuario hasta que finalmente se decide a comprar. Según la web de cursos Aula C.M. este es un proceso que debemos tener en cuenta a la hora de planificar el contenido.
Un usuario pasa por 4 fases diferentes antes de convertirse en cliente. Estas son:
- Toma de conciencia. El usuario tiene un problema o una inquietud y busca información sobre ella. No se ha decidido aún a comprar nada, solo busca respuestas. A medida que va obteniendo información va adquiriendo conciencia sobre el asunto que le preocupa. Por ejemplo, te levantas cada mañana con dolores de espalda. Lo primero que quieres saber es a qué se debe. Qué es lo que te está pasando. ¿Es grave?
- Consideración. Una vez que el usuario realmente es consciente de que tiene un problema, la búsqueda de información se centra en contrastar las posibles soluciones. Quiere saber qué alternativas tiene. Buscará aquella que le resuelva su problema con el menor esfuerzo y a un menor coste. Tú, como experto en la materia, deberás informarle de la que mejor le vaya a resolver su preocupación. Le mantendrás al tanto de los últimos avances tecnológicos y de las alternativas más utilizadas, dando una información fiable y contrastada.
- Decisión. El interesado ya ha recopilado toda la información necesaria. Está decidido a adquirir un producto o servicio que resuelva definitivamente la preocupación que le mantiene en vilo. Si vendes un producto, en esta fase, tu contenido pasa a ser persuasivo. Debes convencer al interesado de por qué tiene que comprar tu producto y no el de la competencia. Hasta llegar aquí, tienes que haberte ganado su confianza y debe reconocer la autoridad que tienes en la materia.
- Fidelización. Esta es una fase que algunos creadores de contenido obvian. Una vez el usuario ha adquirido tu producto es necesario ofrecerle un servicio posventa. Debes darle consejos sobre cómo sacarle el máximo provecho al producto o servicio, o qué opciones tiene si quiere profundizar en el asunto.
Nuestro contenido tiene que ir dando respuesta a las 4 fases. Es como ir acompañando al interesado en su proceso de descubrimiento hasta convertirse en cliente. Según el experto en marketing digital, Romuald Fons, para acelerar las ventas o conversiones, el contenido debemos planificarlo en sentido inverso. Desde las fases 3 y 4 para atrás. Así nos vamos dirigiendo de lo más cercano a lo más lejano.
Soportes para desarrollar contenido.
Hemos estado hablando en este artículo, sobre todo de los blogs y de los artículos escritos. Sin embargo, tienes más soportes para compartir contenido. Siempre tratado desde la perspectiva que hemos visto antes. Otros soportes son:
- Los pódcast son archivos de audio con los que puedes compartir entrevistas, reportajes, consejos, etc. Son como espacios radiofónicos. El interesado los puede escuchar mientras conduce, mientras va en el transporte público o mientras trabaja. Esto lo hace especialmente atractivo para mucha gente. Son más sencillos de editar que los videos. Además, cuentas con una gran variedad de plataformas en las que colgar tus archivos de audio, como Spotify, Ivoox, Soundcloud, Tuneln, etc. En ellos captas a gente interesada, la cual puedes derivar a tu página web a través de un enlace, en al caso en el que deseen más información. Millones de personas cada día visitan estas plataformas para tener contenido que escuchar.
- El video se ha convertido en el rey indiscutible para consumir contenido. El portal Infoautonomos publica un artículo en el que habla de lo interesante que resulta para una empresa contar con un canal en YouTube. Esta plataforma se ha convertido en el segundo buscador más utilizado para encontrar información. La gente consume videotutoriales de cualquier cosa, y le interesa ver reseñas en video sobre los productos que desea comprar. Es más fácil de consumir que los textos y permite poner cara y ojos a quien presenta la información. El video no es incompatible con los blogs. Un video colgado en YouTube o en TikTok permite colocar un enlace directo a la web. Por otro lado, en los artículos escritos de tu blog puedes insertar videos, ampliando la información y mejorando la experiencia del usuario, lo cual ayudará a mejorar su posicionamiento web.
El marketing de contenidos ofrece un campo inagotable para hacer crecer tu empresa en internet.